Creo que sí. Emprender es de locos. Y no digamos en los tiempos que corren. Pero ¿y que sería de este mundo sin la locura de unos pocos (o quizá ya muchos)?
Hace más de 7 años empecé esta aventura de emprendimiento y no te voy a negar que hay momentos muy duros, pero hacer de lo que te gusta tu forma de vida, no tiene precio.
Mi primer proyecto emprendedor fue la creación de la feria Expocoaching y desde entonces hay un impulso natural en mi a crear nuevos proyectos y desarrollar nuevas líneas de negocio.
Por eso me gustaría compartir con vosotros algunos tips que para mi fueron claves e importantes en mis primeros pasos de emprendimiento. Tanto si ya estás metido en “el fregado” como emprendedor como si estás a punto de serlo.
1. Ten claro que es lo que quieres
Para mi este es el principio de cualquier historia que tenga nombre y apellidos. Tener clara la idea que tienes para poder desarrollarla después y para qué quieres emprender con esa idea y no con otra.
2. Hazte experto en tu negocio
Una vez tengas claro lo que quieres es muy recomendable que crees tu propio laboratorio de ideas y que te formules este tipo de preguntas:
- ¿Qué tipo de clientes quiero atraer?
- ¿Cómo voy a monetizar mi negocio?
- ¿Quién me puede asesorar?
- ¿Qué tipo de apoyos tengo y puedo utilizar? (amigos, económicos, expertos, familia,…)
- ¿Cuáles son los resultados que quiero obtener?
- ¿Qué frenos tengo ya y cuales son los que me pueden aparecer?
- ¿Qué voy a tener que perder, cambiar, sacrificar por el proyecto?
- ¿Qué pasa si no llego a los resultados deseados?
- ¿Qué competencia tengo?
El mundo está cambiando y hay que entender hacia dónde cambia. La tecnología está más presente que nunca y hoy en día tenemos una gran oportunidad de acceder a todo tipo de información. Investiga, sé curioso, indaga, pregunta y sobre todo escucha. La información es lo que nos transforma la realidad.
Practica en cosas que no tengan mucha inversión. Saca músculo y conviértete en un experto en crear comunidad.
3. ¿Cómo lo hago?
Una gran pregunta, sin duda. Ahora bien, si tienes claro el QUÉ quieres, el CÓMO va apareciendo. Y aquí es dónde el actor principal es sin duda, “EL PLAN DE ACCIÓN”.
La meta es dónde quieres llegar, está claro, pero tendrás que ir desgranando desde la meta hasta el día de hoy, todos los pasos que tienes que dar para alcanzarla.
En todo proyecto emprendedor hay que echar más horas que un sereno, pero te recomiendo que no te excedas, primero por salud y lo segundo es porque lo más seguro es que no llegues a realizarlo todo y lo único que vas a conseguir es frustrarte y sentirte peor al día siguiente. La gestión del tiempo y del volumen es esencial para llegar a resultados.
Desgrana cada día esa gran meta en submetas que te acerquen a ella. En muchas ocasiones la mejor manera de saber si están funcionando es ir probando. Si ves que te llevan hacia donde quieres, repite y sino cambia tu acción por otra. No pasa nada porque falles, ¡al contrario! Es lo que te va a hacer aprender para redirigir tu hoja de ruta y hacerlo mucho mejor.
Ponte objetivos a corto, medio y largo plazo. Y súper recomendable. Cuando los consigas, prémiate, ¡porque tu lo vales!
Y no te olvides de hacer otro plan de contingencias. Es imprescindible saber el riesgo que puedes correr y tener otra vía de actuación en caso de emergencia.
4. Levántate. Y levántate y levántate….
Si, todas las veces que sean necesarias. Habrá muchas decisiones que te traerán resultados que no esperabas. Pero eso te hará aprender para la próxima y hacerlo mejor. No te quejes y pon todo de ti para ponerte otra vez en pie. Ya lo has hecho más veces. Sólo tienes que recordarlo y hacerlo. No es agradable reconocer que te has equivocado, pero te refuerza para llegar al éxito.
5. Alíate con los mejores
Hay un dicho que es “si quieres llegar rápido ve sólo, si quieres llegara lejos, ve acompañado”.
Rodearse de personas que te aporten, sumen y ayuden, es fundamental. Y sobre todo a la hora de crear el equipo que estén alineados con tu proyecto que lo sientan como si fuera suyo.
6. Sonría por favor
Si no disfrutas, ¿qué crees que pasará? Pues que no tendrá sentido nada de lo que hagas. A veces pasarás momentos que no son precisamente para disfrutar. Y es normal. Pero ¿y el resto?. Si no te lo pasas bien, no sólo repercutirá en ti, sino en los resultados.
Yo intento siempre tomarme las cosas con humor, pasarlo bien y disfrutar porque con las jornadas que tenemos de trabajo, no sé que sería de mi.
¡Te deseo mucho éxito!
Y ya sabes. Sólo prueba, y si te ayuda, repite.
Siempre que te encuentres del lado de la mayoría, es momento de parar y de reflexionar
Mark Twain